Autor: Ec. Jorge Calderón Salazar
Alguna vez escuchamos sobre la formación o sistema dual, pero ¿qué tanto realmente sabemos? Pues bien, consiste en la formación profesional dividida una parte en la escuela de formación profesional (FP) y la otra en la empresa.
En la legislación ecuatoriana, por ejemplo, la combinación integral entre la formación teórica se ubica entre 30% al 50% y la práctica, entre 50% al 70%, y como base en el modelo alemán se instruya a los estudiantes dentro de una empresa formadora, y a la vez, en un instituto técnico/tecnológico o universidad.
Este sistema busca beneficiar tanto el desarrollo profesional de los jóvenes como a la productividad de las empresas del país.
La formación dual tiene una duración que oscila, según la especialidad, entre dos años y tres años y medio; de este tiempo, habitualmente se acude tres o cuatro días a la semana a formarse mediante el trabajo en la empresa, y uno o dos días en la institución educativa, donde se cursan las asignaturas correspondientes a la malla académica que previamente se acordó.
En la organización curricular, el reparto del tiempo entre empresa y la institución educativa se hará por bloques de varias semanas que se realizan enteros en un sitio o en el otro.
La formación profesional dual, el estudiante (conocido como aprendiz) deberá ir aprobando las asignaturas y ejecutar en la empresa todas las funciones requeridas. Para ello, en la empresa existe una persona conocida como formador, quien se encarga de supervisar y enseñar al estudiante, velando el cumplimiento de las actividades encomendadas.